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jueves, 30 de agosto de 2012

Mi boda: La novia

{Abanico - Las joyas - La liga - El ramo - El tocado - El peinado - Los zapatos - El vestido}

Ha pasado un año ya y casi ni nos hemos enterado... ¡cómo pasa el tiempo cuando uno se siente feliz! Este año ha sido como un sueño y a veces me da pena que el tiempo pase tan deprisa porque me resulta difícil de creer que todo vaya a ser así de "perfecto" para siempre.

Aunque sea una tontería, que lo es, a veces me despierto por la noche y estiro la mano para asegurarme de que él sigue ahí, de que no ha ido a ningún sitio y de que voy a seguir siendo su princesa para siempre. Supongo que la vida y la felicidad se compone de momentos, de pequeñas cosas que se nos quedan grabadas para siempre jamás; pueden ser grandes regalos ó las cosas más sencillas del día a día que se quedan en nuestra retina y componen nuestra pequeña historia. ¡Qué afortunada me siento de que mi historia sea la suya también!

El día de nuestra boda fue, sin duda, un punto de inflexión en nuestras vidas y el día más feliz que he vivido hasta hoy. Con el tiempo los detalles se van olvidando e incluso cosas que en su momento fueron muy importantes se convierten en un recuerdo borroso. Nuestro fotógrafo, Michel Quijorna (Alta Fotografía), ha contribuido muchísimo a que eso no suceda y podamos recordar el día de la boda con todo lujo de detalles porque, aparte de las fotos del álbum, tenemos aproximadamente 400 fotos más en las que han quedado inmortalizadas para siempre las caras, los momentos, los detalles, los colores, la luz ...

Me ha costado muchísimo hacer una selección de fotos pero creo que es la mejor manera de celebrar en el blog este primer aniversario de boda. Espero que os guste y, sobre todo, que podáis ver bien todos los detalles por si os sirve de inspiración.

miércoles, 29 de agosto de 2012

Como de Cuento

Ayer fue tarde de trabajo en equipo. Trabajar en equipo mola, siempre y cuando tengas a los compis de "curro" adecuados, si no puede convertirse en una auténtica pesadilla. En mi caso, reconozco que tengo una suerte loca porque "trabajar" con Carlos (Cabite Photography) y con mi hermana Eva (Como de Cuento) es como entrar en un mundo de imaginación en la que cada uno aporta lo que se le ocurre, enseña lo que sabe, ayuda en lo que puede y en el que parece que no hay nada imposible. Así, sí.

Mi hermana ha empezado un blog que se llama Como de Cuento y de verdad os digo que esto promete. Ella es una persona muy creativa y otro culo inquieto como la menda lerenda que si no tiene algo entre manos no está tranquila. Lo de ver la tele sin más en nuestra casa no se ha estilado nunca, qué le vamos a hacer, y esto de tener un blog es la excusa perfecta para lanzarte a hacer cosas que de otro modo nunca harías. Eva es experta ganchillera, "diseñadora" de ropa de bebé, una costurera sin precio y ahora se está iniciando en el mundo de la fotografía y en del diseño gráfico... ¿tiene buena pinta o no?

La tarde de ayer la dedicamos a diseñar la cabecera de Como de Cuento. A pesar de que ninguna de las dos tenemos mucha idea de cómo manejar el Illustrator y de las jugarretas que nos hizo la tableta gráfica, la tarde fue muy productiva y encima lo pasamos super bien. Dibujamos, pintamos, nos desesperamos, hicimos un poco de amigurumi (hasta que se nos perdió la aguja), merendamos tarta de limón, parloteamos sin parar un nos reimos un montón... ¿quién da más?

{Así pintaba así, así...}
Y como no podía ser de otra manera, arretratamos el momento de inspiración para que quede para la posteridad. Después de esto no sé si me asesinará, pero aquí podéis ver a la hermanísima en plena faena.

jueves, 23 de agosto de 2012

Un regalo de papel

En estos días que corren todos tenemos de todo y, si no lo tenemos, vamos y nos lo compramos un día cualquiera y nos quedamos tan anchos. El problema es que al final tenemos tantas cosas que en las fechas clave (léase cumpleaños, reyes, aniversarios...) es casi misión imposible encontrar un regalo que a otra persona realmente le guste y le haga ilusión. Por eso, cada día se lleva más regalar experiencias en lugar de regalar cosas materiales.

Hace mes y medio fue el cumpleaños de la madre de Carlos y a una madre-suegra no se la deja sin regalo de cumpleaños aunque se caiga el mundo. La fecha en cuestión nos pilla cada año a los dos en plena época de trabajo a mansalva y albardamiento mental agudo, así que es complicado encontrar tiempo para ir de compras como Dios manda (es decir, con una idea, sin prisas y con un margen tiempo suficiente). En un momento de lucidez se nos ocurrió la idea del siglo: una cena para dos en el restaurante Cañadío de Santander. Sabíamos que el plan les gustaría mucho a los padres de Carlos, como así fue, pero tan importante como el QUÉ es el CÓMO, así que decidimos tirar de Adobe Illustrator para hacer una tarjeta molona con la noticia.

{Invitación para una cena bien chula}


Imprimimos nuestro "diseño" en cartulina, recortamos la tarjeta, la metimos en un sobre chulo.... ¡y listo el regalo! La cena fue un éxito y todos tan contentos... ¿qué más se puede pedir?

sábado, 18 de agosto de 2012

Pío ... ha llegado para quedarse

Por lo general, este verano está resultando bastante "improductivo". Ni posts, ni manudalidades, ni recetas ni nada de nada: agosto está siendo un mes de sol y calor también en el norte, así que estoy aprovechando para "desperdiciar" las tardes de mi jornada de veranito en la playa vuelta y vuelta, de charleta y dando paseítos a la orilla del mar. No es por nada, y está claro que cada uno barre para casa, pero cuando hace bueno aquí arriba no hay nada que se le pueda comparar... Después de semejante tarea playística, no me queda más remedio que salir a tomar algo con mi pobre marido que viene de trabajar sudando tinta china porque se le amontonan los chollos... y cuando me quiero dar cuenta ya hay que meterse al sobre para el madrugón del día siguiente. Qué cansado es esto del verano... Así un día detrás de otro.... ¡¡¡ya se ha pasado medio verano y mi lista de cosas-para-hacer está ahí muerta de risa!!!

Durante estas semanas he retomado las enseñanzas ganchilliles de mi hermana, aunque sin mucho éxito, la verdad. He intentado hacer varios modelos de patucos y no ha habido manera humana: ni más fáciles ni más difíciles, a mí en vez de zapatitos de bebé me salen albarcas, así que al final lo he dejado por imposible. Le he puesto interés, cargando cada día con el ganchillo a la playa, pero siento decir que esto tiene pinta de que no es lo mío. 

En un último intento desesperado por no poner el ganchillo en la lista negra (y un poco por orgullo propio, para qué nos vamos a engañar) me tiré a la piscina con el amigurumi. Lo bueno que tienen estos muñequitos es que se hacen con puntos muy facilitos, aunque también es verdad que hay que estar contando puntos todo el rato y con el marcador a vueltas para enterarte de en qué vuelta estás y qué te toca a hacer. 

Mi primer amigurumi ha sido Pío, un pollito la mar de mono y un poco regordete que he hecho a partir de los vídeos de Tejiendo Perú. Es la misma página con la que aprendí a tejer entrelac. Por cierto que a ver si me pongo las pilas y termino el dichoso cojín, que lo tengo abandonado a falta de muy poquitín para terminarlo. ¿Os acordáis de mi cojín de entrelac? Ahora da calor sólo ver las fotos, pero vaya bien en invierno, ya os contaré.

Aunque Pío sale muy digno en las fotos, la verdad es que tiene unos puntos de más en las vueltas del centro que le dan un cierto parecido con una bola de billar. Además, me pasé un poco con el relleno así que cuando terminé el cascarón lo tuve que deshacer y volver a hacer porque el tío no cabía dentro de puro gordo que está .... son las cosas del directo...


{Pío... ha llegado para quedarse}

Esperanza enseña en su web Tejiendo Perú cómo se hace el pollito de amigurumi paso a paso: cómo empezar, qué punto utilizar, cómo hacer aumentos y disminuciones... ¡todo! Yo diría que es como las recetas de cocina: si sigues las indicaciones al pie de la letra es casi-casi imposible que no te salga. Lo mejor de todo es que ella te enseña paso a paso para que después sepas interpretar los patrones que puedas encontrar por internet, revistas, etc

Parece que al final no voy a ser tan inútil como parecía con esto del ganchillo, ¿verdad? Creo que el tema patuquil lo retomaré dentro de un tiempo. De momento, me quedo con el amigurumi: estoy haciendo un cerdito muy mono ... ¡¡¡y tengo un libro entero repleto de patrones!!! Creo que la próxima entrega amigurumística será la cabra Ned... ya veréis, ya....


miércoles, 8 de agosto de 2012

El chupetero de Raúl... a babor

Nos ha hecho sudar tinta china pero al final Raúl nació sano como una lechuga el día 20 de julio. Creo que su cumpleaños no se me olvidará nunca, en primer lugar porque es mi primer "sobrino postizo" y me pasé todo el santo día mirando el reloj, consultando el teléfono y pensando en qué estaría pasando por los Madriles; y en segundo lugar porque ese día lo tengo siempre marcado en rojo en el calendario por ser la fecha clave de presentación de los benditos impuestos sobre sociedades. Con ello cada año termina un período de mucho trabajo y mucho estrés para mí y también comienza la jornada de verano. Otro ritmo, otra vida ... otro planeta.

El niño es no es guapo, es guapísimo y, aunque nació chiquitín, ya tiene unos mini-mofletitos que dan ganas de comérselo. Afán de protagonismo no le falta, que ni corto ni perezoso decidió desmarcarse del calendario y nacer un poco antes de tiempo para crear expectación y acaparar todas las atenciones para él solito.

Como no podría ser de otra manera, Raúl(ito) tiene su propio chupetero personalizado: un barquito velero la mar de mono. A estas alturas, cómo hacer un chupetero ya no es ningún secreto, ¿verdad? Quien se haya perdido algún capítulo puede ver el post sobre cómo hice el chupetero para Alicia pinchando en el link.


La primera tarea, como siempre, es la fase de "diseño" del chupetero. Me costó un poco decidirme por la combinación de colores definitiva pero creo que al final quedó muy chulo. Una vez decidida la forma y los colores, recortamos cada parte del barquito en el fieltro del color correspondiente.


Lo siguiente es coser cada parte del barco sobre un trocito de fieltro más grande. Al ser pedacitos de tela tan pequeños yo los suelo coser a mano pero, con un poco de paciencia, se podrían coser a máquina también.
Así es como queda por detrás:

Una vez cosido, se recorta el fieltro sobrante de la base y ya tenemos el delantero del chupetero listo. Este es el momento de coser o bordar el nombre del bebé. A partir de la silueta del delantero, recortamos la parte de detrás.

Ahora toca coser las dos partes del barquito. Quizá esta sea la parte más delicada porque hay que coserlo de forma que no se vean las puntadas por delante... pero es fácil si lo hacemos con un poco de cuidado, como todo. Antes de terminar de coser, introducimos un poco de relleno acrílico para dar volumen.

Una vez terminado el barquito, cosemos la cinta y ponemos la pinza.


Primero cosemos la cinta al barquito, después colocamos la pinza en su sitio y, por último, volvemos a coser la cinta otra vez. De esta manera queda bien asegurada para que nuestro chupetero sea "a prueba de tirones". En el otro extremo de la cinta, cosemos el fieltro para poder quitar y poner el chupete.


¡¡¡ Y listo !!! ya está preparado este chupetero tan rebonito que lucirá Raúl en su ropita dentro de poco.




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